Al volver sendero abajo el silencio se hizo presente en nuestro camino, la niebla se estaba disipando y queríamos disfrutar al máximo los últimos kilómetros del sonido de los pájaros o incluso el de algún otro animalillo perdido en la espesura de la niebla. El ambiente hacía volar la imaginación hacia un mundo de fábulas y de cuentos del estilo de Hansel y Gretel o Caperucita Roja. Las formas y figuras de la niebla poco a poco iban disipándose haciendo que ver mas allá de unos metros sea el mejor seguro hacia una vuelta feliz a casa. Si estuviéramos en un cuento sería algo del tipo; y fueron felices y comieron perdices ....

Esta foto es una fotografía que especialmente me gusta, tiene una enmarcación natural que evidentemente lleva a la vista a bajar la cabeza para no darte con las ramas de la encina y seguir el camino seguro de donde vas y donde pisas.

Un abrazo, espero que os haya gustado y a seguir fotografiando!