En algunas ocasiones tengo que reconocer que me obsesionan los cielos y no consigo lograr transmitir lo que yo quiero con la fotografía. Esta captura fue tomada en semana santa de este año, durante nuestro viaje por tierras del Algarve portugués y Huelva. Si algo tienen estos parajes es la gran cantidad de colores y formas que estos presentan, así como lo cambiantes que son.Quizás se deba a la ausencia de montañas y colinas, lo que le da una mayor dimensión al cielo, el azul se pierde en el horizonte y los vientos construyen nuevos puzzles de nubes que hacen de la toma, una nueva experiencia. Como si nunca hubieras estado allí. 

La fotografía es un Pseudo-HDR en una única toma. Ha sido difícil su procesado ya que la ermita estaba en penumbra y los colores estaban muy apagados, así como las luces e iluminaciones, eran casi grises. Quizás me falló el momento, no lo se, pero esta fotografía volveré a realizarla con el tiempo.

Un abrazo y espero que os haya gustado la captura....y a seguir fotografiando.